Oscar Rosero @endocrinorosero
15 de oct de 20224 min.
Si tengo Hipertensión arterial puedo tomar café?
Aquí te doy lo ultimo en evidencia científica
El café es una bebida muy popular, se estima que se consumen diariamente 2.250 millones de tazas en todo el mundo.
Tal popularidad del café lo convierte en la bebida más consumida junto al agua.
Numerosos estudios han demostrado un efecto beneficioso del consumo habitual y moderado de café sobre el funcionamiento de los sistemas nervioso, digestivo y cardiovascular, así como sobre la función renal. Teniendo en cuenta la altísima prevalencia de hipertensión arterial en el mundo (31,1% de los adultos), se ha suscitado mucha controversia sobre la influencia del consumo de café en la presión arterial y el riesgo de hipertensión arterial. Además, ha habido amplias discusiones sobre la seguridad del consumo de café para personas hipertensas.
Se estima que hay más de 1000 compuestos químicos en el café. La composición del café depende de muchos factores, incluido el tipo de café (p. ej., Coffea arabica, Coffea canephora, Coffea liberica), el método de producción (húmedo, seco, semiseco/semi- húmedo y bioprocesamiento), y el método de preparación (por ejemplo, café tradicional, espresso).
Los factores previos a la cosecha (p. ej., la luz solar) y los factores posteriores a la cosecha (p. ej., el método de procesamiento de los granos de café) representan aproximadamente el 40 % y el 60 % de la organoléptica (perceptible por los sentidos, como el olfato, la apariencia, el sabor). y tacto), propiedades físicas y bioquímicas del café, respectivamente.
Los compuestos químicos más comunes en el café son la cafeína, el ácido clorogénico, la trigonelina, el kahweol y el cafestol. Los compuestos menos abundantes que se encuentran en el café incluyen manosa, cadenas de polisacáridos de galactosa, melanoidinas, flavonoides, catequinas, antocianinas, ácido ferúlico, ácido cafeico, ácido p-cumárico y tocoferoles.
Dado que es probable que no se hayan identificado todos los compuestos químicos presentes en el café y que los mecanismos de acción de la mayoría de los compuestos identificados aún no se comprendan por completo, las propiedades biológicas del café se atribuyen actualmente a la efectos de los compuestos mejor descritos, como la cafeína, el ácido clorogénico, la trigonelina, el cafestol y el kahweol, así como el ácido ferúlico.
Los compuestos biológicamente activos del café tienen muchos mecanismos de acción. La cafeína puede aumentar y disminuir la PA al antagonizar los receptores de adenosina A1R, A2AR y A2BR, alterando así la resistencia periférica total, la diuresis y la frecuencia cardíaca.
El consumo regular de 2 a 3 tazas de café al día conduce al desarrollo de tolerancia a la cafeína. Esta tolerancia explica la falta de efecto presor de la cafeína en las personas que consumen café habitualmente. Otros compuestos que se encuentran en el café, como el ácido clorogénico, la trigonelina, las melanoidinas y el ácido ferúlico tienen efectos antihipertensivos mediados por la reducción de la actividad de la enzima convertidora de angiotensina, la protección de los vasos contra el estrés oxidativo y el aumento de la biodisponibilidad del óxido nítrico.
El consumo habitual de café también puede afectar la PA al alterar la composición de la microbiota intestinal. Un estudio evaluó el impacto del café habitual (hasta 45 ml/día y 45-500 ml/día) sobre la composición de la microbiota intestinal en una población de 147 normotensos sanos. Se ha demostrado que el consumo de café está asociado con un aumento en el nivel de Bacteroides. Dos grupos de (poli)fenoles derivados del café, metoxifenoles y alquilfenoles, así como la cafeína, se asociaron positivamente con la microbiota intestinal.
El consumo habitual de café puede reducir la PA al aumentar el nivel de Bacteroides en la microbiota intestinal.
El consumo de café y el riesgo de mortalidad por todas las causas y ECV
El consumo de café puede reducir el riesgo de mortalidad por todas las causas y ECV, incluso en pacientes después de un infarto de miocardio. Factores como fumar o la forma en que se prepara el café tienen un impacto significativo en el efecto observado del consumo de café en la salud humana. Es importante destacar que los mecanismos bioquímicos de los efectos beneficiosos del consumo de café en la reducción de la mortalidad por todas las causas no se comprenden bien.
Consumo de Café y Riesgo de hipertensión arterial: resultados de estudios clínicos y metanálisis
Los efectos del consumo de café sobre la PA (presión arterial) y el riesgo de hipertensión han sido examinados en muchos estudios y metanálisis. Los resultados de estos estudios y metanálisis indican que el consumo habitual (regular) de 2 –3 tazas de café al día no alteran el riesgo de hipertensión arterial en la mayoría de las personas, especialmente en mujeres y no fumadores. Por el contrario, el consumo no habitual (irregular; ocasional) de café se asocia con un aumento de la PA y puede aumentar el riesgo de hipertensión arterial.
Seguridad del Consumo de Café por Pacientes con Hipertensión Arterial
Los resultados de estos estudios indican que el consumo de 1 a 3 tazas de café/día en la mayoría de los pacientes con hipertensión arterial no aumenta el riesgo de PA descontrolada, incluida la aparición del perfil de PA no dipper, o el riesgo de evento cardiovascular.
Es importante destacar que, en algunos estudios, no se observaron diferencias en los efectos biológicos entre el café natural y el café descafeinado, lo que indica un papel importante para los constituyentes distintos de la cafeína.
En conclusión:
El consumo regular moderado (1-3 tazas de café/día) de café puede reducir la PA y el riesgo de desarrollar hipertensión, así como el riesgo de muerte por cualquier causa. Es probable que el consumo habitual y moderado de café (1 a 3 tazas de café/día) no aumente el riesgo de PA descontrolada y no altere el perfil de PA circadiano en pacientes hipertensos.
El consumo ocasional si puede elevar la presión arterial.
Ref.
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