Oscar Rosero @endocrinorosero
18 de jun de 20233 min.
El ejercicio HIIT (High-Intensity Interval Training), o entrenamiento interválico de alta intensidad, es una forma de ejercicio que combina ráfagas intensas de actividad con períodos cortos de descanso o actividad de menor intensidad. En lugar de mantener un ritmo constante durante todo el entrenamiento, se alternan intervalos de alta intensidad con intervalos de recuperación más suaves.
El HIIT se ha vuelto muy popular debido a su eficacia para quemar calorías, mejorar la capacidad cardiovascular y aumentar la resistencia muscular en un tiempo relativamente corto. Al trabajar a una intensidad alta durante los intervalos, se estimula el metabolismo y se queman más calorías incluso después de que el entrenamiento haya terminado.
Sin embargo las personas con enfermedades articulares inflamatorias (EAI), por la condición de su enfermedad tienen bastantes limitaciones para hacer este tipo de entrenamiento.
Se llevó a cabo un estudio llamado ExeHeart para evaluar los efectos del entrenamiento de alta intensidad por intervalos (HIIT) en la capacidad cardiorrespiratoria, los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares y la actividad de enfermedades articulares inflamatorias (EAI).
El estudio fue presentado por Kristine Norden en la Reunión Anual 2023 de la Alianza Europea de Asociaciones para la Reumatología (EULAR).
El estudio reclutó a 60 pacientes con EAI de la clínica Preventive Cardio-Rheuma en Diakonhjemmet. Los participantes fueron divididos al azar en dos grupos: un grupo de control que recibía atención estándar (incluyendo consejos sobre estilo de vida y medicación para la prevención cardiovascular) y un grupo de intervención que recibía atención estándar junto con un programa de HIIT supervisado por fisioterapeutas durante 12 semanas. Se realizaron evaluaciones al inicio del estudio, a los 3 meses (punto principal de evaluación) y a los 6 meses desde el inicio.
La edad promedio de los participantes fue de 59 años, siendo el 57% mujeres. Los tipos de EAI presentes en los participantes incluyeron artritis reumatoide en un 45% de los casos, espondiloartritis en un 32% y artritis psoriásica en un 23%. Además, el 82% de los pacientes tenían un alto riesgo de enfermedades cardiovasculares.
En el grupo de intervención, el programa de HIIT consistió en dos sesiones supervisadas de 4 minutos de ejercicio a alta intensidad (alrededor del 90%-95% de la frecuencia cardíaca máxima), alternadas con actividad moderada al 70%. El grupo de control realizó sesiones de ejercicio de intensidad moderada sin supervisión.
El objetivo principal del estudio fue evaluar los cambios en la capacidad cardiorrespiratoria, medida a través del consumo máximo de oxígeno (VO2 max) durante una prueba de ejercicio cardiopulmonar. También se evaluaron resultados secundarios como el dolor y la fatiga utilizando un cuestionario con una escala numérica del 0 al 10, donde 0 representaba la ausencia de dolor o fatiga.
Los resultados del estudio mostraron que el HIIT mejoró significativamente la capacidad cardiorrespiratoria en los pacientes con EAI. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta mejora en la capacidad cardiorrespiratoria no coincidió con cambios en el dolor o la fatiga experimentados por los pacientes. Esto sugiere que, aunque el HIIT mejoró la forma física, no tuvo un impacto directo en los síntomas de dolor y fatiga.
Los investigadores recomendaron incluir al menos una sesión de ejercicio de alta intensidad por semana para aquellos pacientes que deseen maximizar su capacidad cardiovascular. Sin embargo, también es beneficioso incorporar ejercicios de intensidad moderada y baja si se prefiere.
Es importante tener en cuenta que las personas con enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas tienden a ser menos activas físicamente que las personas sanas. Por lo tanto, es fundamental incluir la actividad física como parte del tratamiento no farmacológico para estas personas.
En resumen, el estudio demostró que el HIIT es una intervención fisioterapéutica factible y efectiva en pacientes con EAI. No empeoró los síntomas de las enfermedades articulares inflamatorias y puede ser implementado en entornos de atención primaria como una opción de tratamiento no farmacológico efectiva.
REF.
Nordén K, Semb AG, Solveig Dagfinrud H, et al LB0007 Short- and long-term effects of high-intensity interval training in patients with inflammatory joint disease: The ExeHeart randomized controlled trial Annals of the Rheumatic Diseases 2023;82:203-204.